Después de tres grandes años, Miquel Blanchart deja de entrenar al SBR Open Team de Mataró. Con estas estas palabras me despido de un gran entrenador y mejor persona.
Junio de 2011. En unas
sillas amarillas de la
tienda SBR un chico joven habla ante unos aspirantes a
triatletas. Explica el reto SBR, conseguir terminar un half IronMan con tan
sólo tres meses de preparación. Se le ve buen chaval. Yo todavía no sé quién es,
sólo que se llama Miquel Blanchart. Debe de ser un mago, porqué nos ve a todos
capaces de conseguir el reto. Yo vengo del running y he hecho dos maratones
pero mi experiencia en el triatlón es prácticamente nula.
Llego a casa y busco su
nombre en Internet. Veo que es uno de los grandes a nivel nacional y que hace
años que lidia grandes combates en el triatlón.
Tengo ganas de ponerme a
sus órdenes. El primer día de entrenamiento es una pasada. Coro y un servidor
como únicos alumnos de aquel futuro crack de la larga distancia. Faltan algunos
compañeros que no han podido venir y él nos hace una clase magistral.
Recuerdo aquellos meses
intensos, duros, con dificultades para compaginar familia, trabajo y dos
entrenamientos diarios. Pero iba creciendo como triatleta con sus consejos y
sus continuos ánimos cuando los entrenamientos se intensificaban, cuando hacía
series de 1.000 m
sufriendo como nunca. En paralelo él también iba creciendo como crack mundial y
ganaba el campeonato de España y de Europa de media distancia.
Tres meses después yo
terminaba mi primer half y conseguía un sueño que parecía imposible.
A partir de ahí la familia SBR se fue
ampliando con nuevas incorporaciones. Y él hacía de padre de todos, a pesar de
sus 27 añitos. Pero no sólo hacía de padre deportivo, también nos hacía de
consejero, de psicólogo, de dietista, de médico ... ¿Cuántas veces me ha tenido
que escuchar que si me duele aquí, que si quiero hacer esa prueba y me tienes
que aconsejar. Incluso compartimos juntos algunas de las hostias que me ha
regalado la vida y que pocas personas del equipo sabían. Había días que iba al
entrenamiento por inercia, desmotivado. Pero él me animaba a seguir luchando
por los objetivos que me había marcado al iniciar la temporada. Sus
palabras eran de sabio, sus ánimos mostraban un gran amigo. El mundo del
triatlón está viendo ahora con sus hazañas lo grande que es como deportista,
pero muchos no saben que es aún más grande como persona.
Quizás él no quiere que
explique lo que pasó en mayo del 2013, pero no me lo puedo callar. En el mismo
fin de semana coincidían la Half de Calella y su debut en IM en Lanzarote. Yo
llegaba a mi tercera media IronMan con muchas ganas, cargado de ilusión y con 8
meses de intensa preparación para poder terminar una prueba que el año anterior
no pude disputar por la hospitalización de una persona querida. Aquel año
tocaba disputarla y terminarla. Había pasado horas y horas entrenando como un
loco.
Llegaba en un buen momento de forma y, sobre todo, en un buen momento
anímico. Mi mujer y mi madre venían a animarme. Pero todo se torció por unos
problemas mecánicos de mi bici que me dejaron tirado en medio de la sierra del Montseny.
Tardé 4 horas entre que me vinieron a buscar y llegué a Calella. La rabia y la
impotencia que sentía se plasmaron en la crónica más cruda y triste que he
escrito nunca, lejos de mis bromas habituales. Él lo leyó y al día siguiente en
el entrenamiento, cuando todos lo estábamos felicitando por su gran segundo
puesto en Lanzarote me regaló la camiseta de finisher que le habían regalado.
Quedé petrificado. Que un gran triatleta te regale esto es como si Messi te
regala la camiseta con la que ha ganado la Champions ...
No he sido tu alumno más
aventajado, pero sabes que lo he dado todo en cada momento, en cada entrenamiento
que hemos compartido. Son tantos momentos importantes que nos has regalado y
tantas broncas (con cariño) que me has hecho que no me sé ver un martes a
pistas sin ti, sin contarte mis problemas, sin felicitarte por lo que logras
año tras año.
Pero tú ahora nos dirías
que debemos seguir luchando por nuestros sueños y lo haremos. Y cuando podamos
te lo enseñaremos.
Gracias Miguel por
hacerme como soy, tanto a nivel deportivo como a nivel personal.
Tu amigo.
0 comentaris:
Publica un comentari a l'entrada
Click to see the code!
To insert emoticon you must added at least one space before the code.